Cinco consejos para poner en práctica hábitos alimentarios saludables:

  1. Considera la dieta como un estilo de vida saludable y no como una moda o tendencia: cuando consideras la dieta como un estilo de vida único, comienzas a tomar decisiones sostenibles y equilibradas, que apoyan tu salud y bienestar.
  1. Vuelve a los alimentos naturales, frescos y de temporada: cuantos más alimentos naturales y menos ultraprocesados consumas, mejor será tu salud. Esto implica llevar una dieta rica en frutas y verduras de colores vivos, fuentes proteicas de calidad, grasas saludables, cereales integrales, hierbas y especias y una cantidad adecuada de agua, y disminuir el azúcar añadido.
  1. La dieta es bioindividual: no existe un único tipo de alimentación que sirva para todo el mundo. Todos tenemos necesidades alimentarias distintas, ya que la salud, la edad, la genética, los valores, el contexto, las preferencias, la rutina, los niveles de actividad e incluso la compañía, influyen en los alimentos que son mejores para ti.
  1. Aléjate de la moralidad de la comida: no conviene etiquetar los alimentos como buenos o malos ya que esto podría impedir tener una relación saludable con la comida. Además, se crean falsas expectativas y un sentimiento de vergüenza o culpa por consumir ‘alimentos prohibidos’. La nutrición no es puramente física y muchas veces optamos por comer ciertos alimentos porque los relacionamos con algún vínculo social, alegría o porque nos traen algún recuerdo. Es bueno estar en paz con estas preferencias en el contexto general de nuestra dieta. Es cierto que algunos alimentos tienen mayor densidad de nutrientes que otros. Cuando estos alimentos pasan a ser los alimentos básicos de tu dieta, puedes optar ocasionalmente por alimentos que son menos nutritivos, pero que te enriquecen el alma. Este proceso requiere paciencia y autocompasión.

No existe un único tipo de alimentación que sirva para todo el mundo. Todos tenemos necesidades alimentarias distintas

 

  1. Desplazar: es una técnica que se centra en añadir más alimentos naturales en tu dieta, en lugar de eliminar otros. Eliminar comidas sin examinar de antemano las razones por las que las elegimos, no te permite conectar y trabajar con las emociones y los sentimientos implícitos. En cambio, desplazar alimentos te brinda muchas posibilidades. De esta manera, sin imponerte restricciones, podrás descubrir por ti mismo que, añadir más alimentos naturales a tu dieta, disminuye la ansiedad de consumir otros. No tengas prisa por cambiar toda tu dieta de golpe, tómate tu tiempo y haz pequeños cambios que puedan ser sostenibles en el tiempo.